El mejor medio para hacer buenos a los niños, es hacerlos felices
Oscar Wilde
¿En que está fallando la educación actual?, ¿cómo podemos contribuir para la mejor formación de nuestros niños y adolescentes?.
Mucho se ha hablado sobre los problemas de la educación en nuestros días, pero en mi concepto es necesario brindar soluciones.
Como padres y educadores responsables, resulta necesario brindar una educación de calidad; para que nuestros jóvenes enfrenten la vida de la mejor manera.
A continuación detallo 7 aspectos de vital importancia para una «revolución educativa integral»
1) Educar para la felicidad
La real base de la educación es la buena relación entre padres-hijos y profesor-alumno. Es trascendental mantener una relación de confianza, amistad, consideración y respeto con nuestros niños y adolescentes. A partir de lo armoniosa de esta relación, incluir la «materia de la felicidad» para su existencia.
Es indispensable enseñar a los jóvenes el valor de la alegría, el positivismo, el gozo por la vida. Que encuentren satisfacción por las pequeñas cosas: el abrazo de un ser querido, contemplar la naturaleza, alabar a Dios… .
Cuando le entregamos amor genuino a nuestros hijos ( sin olvidar la disciplina y la corrección), ellos se sentirán con más confianza y será mas fácil inculcarles el vivir para ser felices, siendo ellos mismos; con originalidad y una dulce personalidad.
2) Iniciativa emprendedora
La enseñanza formal se centra en conocimientos y destrezas para convertir a los jóvenes en buenos empleados de la maquinaria productiva.
Es menester incentivar a los adolescentes a hacerse las siguientes preguntas: ¿un empleo es el objetivo de mi vida?, ¿un salario es suficiente para mí?, ¿si no consigo un buen empleo, qué hago?.
Cada vez escucho con más frecuencia, la historia de excelentes profesionales que dedican meses a procesos de selección y entrevistas laborales, para al final no ser tenidos en cuenta; y peor, en ocasiones ni siquiera se les notifica, si terminó el proceso o no.
Es el momento de que las nuevas generaciones, tengan el deseo y la mentalidad de emprender por su cuenta proyectos empresariales y de generación de ingresos; cuando en estos momentos, el terreno laboral es muy competitivo e inestable.

3) Trabajo colaborativo
Cada día resulta muy necesario incentivar el espíritu colaborativo en nuestra juventud. Que desarrollen la iniciativa de ayudar y servir desinteresadamente a sus amigos, iglesia o comunidad, sin necesidad de pedirles su colaboración.
El trabajo en equipo es una cualidad especial de acción, que se debe fomentar, para que nuestros adolescentes tengan la capacidad de liderazgo, y la sinergia del trabajo en grupo, muy necesarios para su crecimiento.
4) Creatividad
La educación formal parte de la concepción memorística del conocimiento. Muchas veces sucede que excelentes estudiantes, con notables calificaciones, fracasan en varios aspectos de su vida profesional.
Desde el propio hogar, es necesario desarrollar las ideas creativas. Que estimulemos a nuestros niños y jóvenes a pensar, a solucionar pequeños problemas cotidianos.
La creatividad no solamente es realizar inventos, crear patentes, emprender nuevas empresas. Es vital que el joven o la adolescente generen ideas, por ejemplo: cómo mejorar sus métodos de estudio, escoger una carrera adecuada, cómo ayudar a sus padres para el pago de sus estudios superiores, etc… .
Ser creativos e innovadores significa solucionar problemas cotidianos, siguiendo métodos no convencionales.
De igual manera, se recomienda enseñar a nuestros hijos a tener un espíritu crítico, a no tragar entero. Que cuando reciban una información o conocimiento, indaguen por ellos mismos; busquen e investiguen su veracidad, así crecerán intelectualmente.
5) Control de las emociones
En mi opinión en la labor de padres y educadores responsables nuestra meta debe ser educar para la vida.
En este sentido, es menester inculcar a la juventud de hoy, el tener control de las emociones negativas como por ejemplo: la ira, el miedo, los celos y la procrastinación.
Esto significa que los adolescentes deben actuar a pesar del temor y tener sabiduría para no dejarse llevar por la ira. La Psicología nos dice: «no permitas que tus emociones controlen tus pensamientos, tus acciones y tu vida».
Puedo resaltar para la vida de nuestros hijos el valor del dominio propio. El desarrollo del dominio propio crea en los adolescentes la facultad de tener total control sobre su propio cuerpo, su mente y sus acciones; dejando a un lado las malas influencias del ambiente y los problemas sociales.

6) Desarrollo de valores
Un error de la educación actual es poner acento en los contenidos, y no en las personas. Es vital desarrollar en nuestra juventud la mayor cantidad de valores éticos, morales y cristianos, para el desarrollo de su personalidad.
En el hogar resulta indispensable exhortar a nuestros hijos para incorporar a sus vidas valores importantes como: la responsabilidad, la disciplina, el esfuerzo, la integridad, la honestidad, el altruismo, la valentía, la resiliencia etc… .
La mejor forma de enseñar es con nuestro propio ejemplo de vida. Hoy en día se presenta mucho la doble moral; personas que profesan una ideología y ejecutan otra.
La educación en valores es la que convierte a nuestros jóvenes y niños en personas íntegras y de calidad que la sociedad necesita.
7. Proyecto de vida
Lo dejé al final de la lista porque lo considero de vital trascendencia en la enseñanza de nuestros jóvenes y niños.
Una de las causas de los embarazos precoces en los adolescentes, y el abandono escolar, es la falta de un proyecto organizado de vida.
El joven o la adolescente que toma las riendas de su propia existencia establece metas, objetivos personales y conoce muy bien la repercusión de sus actos en su vida presente y futura.
En este sentido, es muy necesario orientar a nuestros hijos sobre los graves peligros que existen en el ambiente educativo y social actual: drogadicción, homosexualismo, presión de grupo, libertinaje, pandillerismo, enfermedades de transmisión sexual, entre otras.
Es muy importante conocer los amigos más cercanos de nuestros hijos y no darles mucha libertad. Los jóvenes necesitan amor, consideración, motivación para que cumplan el real propósito de sus vidas.
A pesar de las fallas del sistema educativo actual, nuestra gran misión es aportar activamente en la educación integral de nuestros hijos, para hacer de ellos los lideres destacados de nuestra sociedad.
